lunes, 19 de julio de 2010

RESILIENCIA Y APRENDIZAJE EN EL NUEVO MILENIO.

RESILIENCIA Y APRENDIZAJE EN EL NUEVO MILENIO.

Una mirada desde la productividad

LA REFLEXION DE LA DECADA.

Germán Pilonieta Ph.D.[1]

2010 – 2020

Presentación.

Agradezco a la seccional del Sena Norte de Santander la invitación para este congreso Internacional sobre Pedagogía y Didáctica, vistas desde la innovación y la prospectiva.

Este aporte tiene que ver con la mirada que se pueda hacer de los procesos de formación para la productividad teniendo como fundamento la relación entre Innovación, investigación, pensamiento y procesos formativos del milenio.

Partire de algunos breves comentarios sobre el sistema educativo en general para pasar luego a los factores estructurales de productividad en el nuevo milenio, para termimar con algunos comentarios sobre la investigación y su relación con la innovación.

INTRODUCCION

Han pasado muchos años y en todos ellos se han venido haciendo muchos experimentos en relación con el fenómeno de lo que en algún momento de denomino educación y que a lo largo del tiempo y de las diferentes situaciones y espacios, fue perdiendo y ganando nuevos significados, pero que ahora, ya nadie sabe exactamente de que se trata. Ha migrado tanto en concepto que es irreconocible y poco identificable, al punto que cada quien que lo enuncia, lo escribe o trata de hablar de ello , se enfrenta a un océano de interpretaciones sin fin.

La relación entre educación y escuela es tan fuerte que no se puede pensar la una sin la otra. El origen institucionalizado de lo educativo fundamentado en las formas y sistemas de producción de las sociedades marco una dirección y unas estructuras tan fuertes que hoy son muy difíciles de transformar. Paso lo mismo que con la creación y desarrollo de los ejércitos en estos países que se hicieron bajo el modelo de otros ejércitos de otros países y circunstancias y como es obvio, a la larga resultaron ser ineficaces por su estructura, por lo pesados y inútiles en su equipamiento y su organización. A las escuelas les ocurrió lo mismo y por eso son, en esta época, ineficientes e ineficaces.

Pensar desde otros referentes de sentido, que significa en concreto, identificar las dinámicas de futuro y sus contextos, podrían permitirnos, no solo aprovechar significativamente lo verdaderamente relievante del pasado, sino crear nuevas y pertinentes dinámicas formativas.

El intento de explorar este espinoso problema, lleno de contradicciones y acomodaciones, defensas y ataques, angustias y desilusiones, pero también de esperanzas y oportunidades, es lo que va a constituir el marco de desarrollo de este aporte. La finalidad consistirá en poner en juego conceptos tales como formación y desarrollo, resiliencia y aprendizaje, autonomía e innovación, en función de las nuevas dinámicas de la productividad en todo sentido.

Por lo general hay un sin sabor en todos, respecto de lo que va dejando la forma como se hace educación en términos de personas, actitudes y vidas. Es decir, de resultados en el terreno de la sociedad y su desarrollo.

La coyuntura de nuestras dinámicas sociales, vistas desde lo mas inmediato como fueron las elecciones de este año de 2010, con sus antecedentes y sus consecuentes, además de lo que se aprecia en el terreno de lo que hace y vive la juventud hoy, que es de público conocimiento, nos puede llevar a concluir que los efectos de lo que podría estar pasando radica en la forma como estamos concibiendo y ejecutando la formación y la educación de esas personas.

No es gratuito ni se da por accidente que muchas de las personas privilegiadas de este país que fueron educadas hasta el nivel superior y que tuvieron la oportunidad de posicionarse en la sociedad la hayan traicionado y estén en la cárcel o a punto de estar. Muchos otros la explotan para su beneficio personal. Y los demás, somos indiferentes ante el avance de la miseria, la pobreza y la delincuencia en todas sus manifestaciones. Los estados de corrupción unidos a las ansias de poder y de avaricia de muchos de los candidatos los lleva a prácticas por todos conocidas y entonces uno puede pensar muy fácilmente que eso de las votaciones esta muy lejos de la democracia, es uno de los tantos ejemplos. Y este hecho tan grave hace que se ponga en tela de juicio la influencia positiva y definitiva de la educación en las actitudes, los valores y las competencias para vivir en sociedad.

No hay evidencia científica ni investigativa que haya podido demostrar, mas allá de las suposiciones y presunciones, la incidencia directa de la educación en el crecimiento económico. Lo que si existen son investigaciones en donde se ha demostrado ampliamente que la integración de las tradiciones familiares , las diferentes realidades politico económicas y las categorías diferenciales históricamente construidas, amplian, ponderan y potencian la mirada frente a un título académico y produndizan la diferenciación social. La educación transmite las relaciones sociales de poder pues los profesionales se ven obligados a introducirse en las dinámicas de las oportunidades sociales, a través de sus “marcas” de origen, los apellidos, y la tradición del tipo de institución en la que se graduan. Cfr Bourdieu 1997.

Sin querer entrar en profundidad sobre el particular, es muy importante que se identifiquen todas las fallas que ha venido dejando la famosa educación tradicional en este país, y no nos hagamos muchas ilusiones al respecto, y mucho menos con los enfoques que se proponen desde la institucionalidad y que refuerzan precisamente lo que ha venido ocasionando tantos problemas.Cfr DNP.2007.

El problema fundamental esta centrado no solo en los enfoques sino en la formación poco pertinente de los maestros y ello nos lleva a la vacuidad de las facultades de educación y las debilidades administrativas que horadaron el antiguo espíritu de las escuelas de formación de maestros, para convertirlas en superficiales y poco pertinentes facultades de educación. No es necesario fundamentar esto ya que a todas luces el resultado de eso se ve todos los días en todos los centros educativos del país. Cfr. Evaluación de docentes y pruebas saber 2009.

Una transformación radical se hace necesaria para alcanzar los estándares básicos en los nuevos procesos formativos con los cuales se pueda competir con las exigencias de las dinámicas de futuro. Y no se trata de seguirla la corriente al desarrollismo, se trata de ser lo suficientemente conscientes de que esas dinámicas y muchas otras que aun no se dan, son las que permitirán los niveles de desarrollo de las futuras naciones y eso se mide en calidad de vida y bienestar para todos. Convivencia productiva.

El paso inicial empieza por el reconocimiento de la fallas y como en alcohólicos anónimos, el inicio se da con la declaratoria pública de un problema íntimo. Mientras los actuales docentes, profesores e instructores, no reconozcan sus limitaciones y la poca pertinencia de su formación para abordar con suficiencia y competencia las nuevas dinámicas del futuro, el problema se ocultará, se desdibujará y se defenderá lo indefendible, la incompetencia real del sistema para formar las nuevas generaciones.

Frente a este álgido, pero vital factor de desarrollo, se dan toda clase de reacciones, y sin importar cuales sean estas, la verdad es que el problema sigue avanzando exponencialmente con gravísimas consecuencias para todos, es un asunto de seguridad nacional, pues la debilidad en el desarrollo ocasiona falta de reconocimiento y este, como todos sabemos, ha sido la causa de todos los males humanos y de las guerras y ahora, del terrorismo que nos acompañara durante todo este milenio.

Ahora bien, por donde seguir. Cualquier arista de gran problema que abordemos nos conducirá indefectiblemente a las causas estructurales y es allí en donde valdrá la pena centrar toda la atención, pues si “seguimos arreglando la sillas” y haciendo alarde de certificaciones y acreditaciones de formas y maneras de gestionar inútiles y enredados sistemas arcaicos de educación, las cosas no variaran en la dirección necesaria, ni será fuente de desarrollo real, en un contexto como el del nuevo milenio.

Reconocimiento y formación.

Desde la perspectiva de las pedagogías de la esperanza, en donde esperanza significa “oportunidad”, el reconocimiento de las condiciones reales de las personas y el reconocimiento de las dinámicas de futuro, son los dos factores vitales sobre los cuales es preciso demarcar los diseños formativos del presente para el presente y para el futuro.

Cuando se abordan las condiciones de las personas que están y deben estar involucradas en los procesos de desarrollo de una nación, estas se refieren a las de los que son responsables de las políticas nacionales, las de los que deben generar procesos formativos, como son los nuevos maestros formadores, y también las de los niños, los jóvenes y los adultos en entornos diferenciales tanto familiares, como de micro sociedades.

Las dinámicas de futuro, se han venido configurando a lo largo de todos estos años y esa configuración se ha caracterizado por la complejidad en todos los sectores del hacer y del pensar humano. Por lo tanto, un factor que la evolución de la humanidad nos señala, es la complejidad y es ese factor el que se va a constituir en uno de los ejes mas poderosos de los nuevos diseños de los procesos de formación.

Los diversos tipos de relaciones que se han dado en las mentes de muchos hombres, desde el inicio de los tiempos humanos, ha sido el de poder simbolizar de muchas maneras esas relaciones. Las dinámicas del descubrimiento y las dinámicas del aprendizaje se han desarrollado precisamente por este nivel alcanzado por los seres humanos a través de los milenios, el de la simbolización que necesariamente ha necesitado el desarrollo de una habilidad, la de la abstracción. Y este otro factor, el de la abstracción, es el otro eje sobre el cual deben desarrollarse los nuevos procesos de formación.

La producción responsable de los conocimientos y sus aplicaciones hacen que la bioética se constituya en el tercer factor de los procesos de formación en el milenio.

Los instrumentos que han permitido la evidencia de estos y muchos otros procesos humanos han sido, los lenguajes, la interacción y la acción creativa. Las múltiples expresiones de los pueblos y las naciones se han venido convirtiendo en legados, algunos muy positivos y otros no tanto.

El reconocimiento de estos legados y la identificación de los factores que los hicieron ser tan poderosos o tan perversos, es parte de la necesidad de reflexión productiva las nuevas generaciones, en función de establecer el contraste entre criterios primitivos y actuales, entre fuerzas y debilidades, entre verdades útiles y verdades inútiles.

No existen dinámicas de futuro sin dinámicas de pasado. Pasado y futuro que se conjugan en todos los presentes humanos, hacen de ese presente el eje mas significativo del hacer formativo y del hacer social. El reconocimiento del significado de ese eje, única realidad humana, integrado por lo que la memoria guarda del pasado ya no existente y de la ilusión y la imaginación de un futuro por llegar, se debe configurar en acción formativa.

El reconocimiento de las condiciones reales de quienes deben hacer formación es también un factor relievante en el acto formativo. Condiciones que se conjugan con las dinámicas de futuro convertidas ya en necesidades de visión y de formación que son las que deben constituirse en sus propios factores formativos. Por tanto los nuevos “currículos” formativos de los nuevos maestros formadores deben estar direccionados por competencias que deben ser las necesarias y suficientes para el manejo de complejidades y de abstracciones, de relaciones, valores y saberes, que tienen sentido en el futuro.

Pero no solo son estas competencias. La identificación de las condiciones reales de los estados cognitivos, afectivos y relacionales de los niños, jóvenes y adultos, en situaciones diferenciales, sujetos de formación, son también competencia de los nuevos maestros formadores. Tal vez es su mas importante competencia.

Desde la perspectiva de una organización mas coherente con el desarrollo humano que se debe traducir en políticas de Estado, mas consistentes que las históricas, lo estructural formativo, debe alcanzar un nivel mas aproximado a las dinámicas de futuro y por esta razón la nueva educación organizada en fases y momentos ( ciclos para algunos) debe dar lugar al reconocimiento de los procesos formativos del milenio. Procesos sistemáticos, sistémicos que tengan lugar en espacios dinámicos de formación. Concepciones que superan las antiguas concepciones de grados, cursos , asignaturas, salones de clase e instituciones educativas, concepciones que se caracterizaban por estados de inercia, productores de heteronomía y exclusión.

La categoría que reúne lo que se requiere para el futuro de las personas es indudablemente formación y por tal razón, el énfasis y las nuevas definiciones deben ser en torno de esta vieja, pero renovada categoría. Habilidades, base y fundamento de las competencias humanas, conocimientos que se convierten en saberes, actitudes y hábitos que se recubren de valores y acciones que se traducen en construcciones de todo tipo, con la finalidad de alcanzar los diversos grados de autonomía, se constituyen en la hoja de ruta formativa.

Reconocimiento y formación son dos caras de una misma moneda o mejor, son dos de las caras mas significativas del proceso mas significativo, el de diamantización humana. Se trata de elaborar el mas fino y hermoso brillante de una piedra que tiene todo el potencial, pero que en manos de un experto tallador se podrá verificar todo aquello de lo que es capaz y en manos de un mal tallador su esencia intrínseca será dañada para siempre. No hizo lo que debía por no tener la competencia para ello. Dejo que el diamante no fuera brillante, sino una caricatura, un mal corte y un brillante perdido.

Este símil, muy cercano a lo que en esencia significa realizar el papel de maestro tallador, de generar las condiciones mas propicias para sacar de dentro lo mas hermoso de la naturaleza humana, esta muy lejos de lo que hoy hacen las facultades de educación con quienes deben hacer este trabajo tan preciso y tan lleno de facetas. También esta un poco mas lejano de lo que los actuales docentes y profesores son y hacen .Y esto , además de ser muy preocupante, es dramático, pues ya es suficiente con todos los diamantes echados a perder. Es preciso que haya reconocimiento de esto, de este trabajo mal hecho y sobre eso, construir nuevas alternativas de esperanza y eso es, de oportunidad. Las categorías que corresponden a estos fenómenos son pues: la deprivación cultural y el síndrome didactogénico.

Este problema de tipo estructural se manifiesta en inumerables formas y muchas de ellas responden al síndrome de la deprivación cultural que se explicita como la capacidad reducida en las personas para responder adecudamente a las diversas fuentes de estimulación. Tal carencia hace que los procesos subsiguientes de aproximación a las diferentes situaciones y procesos de formación para la productividad, no aparezcan por lado alguno, o si se dan, son de nivel muy bajo.

El síndrome didactogénico, tiene que ver con lo que queda después de una mala educación, es otro de los factores que mas inciden de manera negativa en los procesos de formación para la productividad y la convivencia que se realizan en la educación postsecundaria.

La construcción de alternativas de oportunidad, atendiendo a un viejo principio en reeducación, el de oportunidad, tiene como condición lo antes mencionado: la identificación de las dinámicas de futuro y el reconocimiento de las condiciones, de quienes lo promocionan, de quienes son sujetos de formación y de las diversas manifestaciones de las minisociedades actuales.

Resiliencia y formación.

“ Entendemos que la única ventaja competitiva que tendrán las empresas y las organizaciones del futuro, es la capacidad de sus directivos y demás agentes para aprender mas rápidamente que sus competidores”

cfr: Ariel de Geus 1988.

Todos sabemos que no todos los jóvenes y los adultos se encuentran en las mismas condiciones, ni responden de igual manera a los mismos entornos. Los estados de pauperización cada vez mas abundantes y las condiciones en que miles de jóvenes se crían, son evidentemente mas vulnerables y esto los pone en riesgo inminente. El tipo de relaciones en las que se desarrollan les generan actitudes y comportamientos que los pone al borde de estados de marginalidad y debilidad. Muchos otros, que aparentemente son acomodados en cuanto a bienes y servicios, también presentan los síntomas de las nuevas adversidades y al igual que los de la marginalidad, están carentes de muchos factores formativos.

Por lo general van a escuelas y colegios en donde se supone que son todos iguales y desde la cultura del apiñuzcamiento, se hace educación en masa, estilo supermercado o lo peor, en megacolegios, en donde de las diferencias se pierden y con ellas, los estudiantes también. Políticas para la educación en masa. Prácticas educativas genéricas para ocultar las diferencias y hacer caso omiso de las necesidades de cada quien. A eso le llaman calidad, que todos los que van y se aguantan , reciban loque los docentes les dan. Cobertura es apiñuzcamiento. Calidad, es paso de pruebas estandarizadas.

En el camino se van quedando muchos, ya sea al inicio de su escolaridad, mortalidad académica por llamarlo como se le dice en el argot escolarizante, al terminar el primer curso o grado , al iniciar la secundaria, al terminarla, al iniciar la universidad o a la mitad de ella. Son cientos de miles de personas las que se quedan, o los que no logran entrar por mil razones y los que logran salir , salen como profesionales mediocres sin ningún tipo de formación humana, su meta: sacar provecho de los demás, con su carrera profesional. Montarse en un lugar de ascenso al poder para…………. ,bueno eso ya lo sabemos todos. Los que se salvan de todo esto y van a la filas de una vida normal y acomodada, o sufren las consecuencias del estado de inseguridad o simplemente miran para el otro lado y siguen viajando y disfrutando de sus ganancias.

Parece que no podemos concebir un mundo diferente del que tenemos y por esa razón seguimos haciendo lo mismo, para conseguir los mismos resultados y ahí vamos cómodos, ajustándonos. Construyendo cada vez mas cárceles para mas gente que no pudimos formar.

También parece que no podemos pensar en otro tipo de educación que en la que tenemos. Y entonces hacemos lo mismo para obtener los mismos resultado año tras año y así sucesivamente. Para que desacomodarnos si así las cosas marchan y todo va andando, no importan las consecuencias. No importa si hay mas suicidios de niños y jóvenes, no importa si hay mas niñas embarazadas, no importa si hay mas integrantes de pandillas juveniles, no importa si hay mas y mas fumadores y consumidores de drogas y alcohol. No importa en que usan el tiempo libre, si en la prostitución juvenil, en la delincuencia organizada o en la aproximación al terrorismo. No importan tantas cosas que suceden , pues eso nada tiene que ver con las asignaturas y demás parafernalia escolarizante.

Se aboga por una transformación real, no por arreglos cosméticos para las acreditaciones y certificaciones. Se necesita una conciencia radical para el logro de una transformación también radical que permita y facilite la salvación de las nuevas generaciones ya que las anteriores lamentablemente las perdimos.

Una nueva mirada puede darse a través de nuevos enfoques y sobre todo de nuevos haceres. Nuevos enfoques en donde el principio de oportunidad este siempre presente. Oportunidad para la generación de nuevos maestros formadores y oportunidad para las nuevas generaciones de niños y jóvenes de todos las microsociedades. Se trata de un enfoque eminentemente formativo diferencial. Este tipo de enfoque es el resiliente, en donde la condición real es el objeto fundamental de la evaluación, en donde la nueva pedagogía se fundamenta en la neurociencia y en los avances sobre cerebro y no en las eternas suposiciones de muchas personas que hablaron de pedagogía en el pasado, ni en las disquisiciones vacías de docentes sin formación científica en donde prima el yo creo, yo pienso, a mi me parece. No es posible ayudar a nadie con escasez de conocimientos y con la grandiosidad de un ego alimentado por discursos sublimes y concepciones débiles y caducas.

Si se acepta que los nuevos procesos formativos tienen como criterios básicos de comprensión y diseño, las dinámicas de futuro y la condiciones reales de quienes se forman y de quienes forman, entonces es preciso tener herramientas que puedan apoyar este tipo de comprensiones y de acciones formativas.

La primera y mas significativa herramienta es de tipo conceptual, pues sin ella no es posible avanzar ni un centímetro. Se trata de reconceptualizar la categoría formación y para ello, es preciso partir de un contexto bien determinado, y ese es el futuro como ya lo he mencionado antes. La segunda herramienta, también de carácter conceptual, tiene que ver con la resiliencia, ya que esta permite visualizar los parámetros sobre los cuales de pueden diseñar procesos formativos para personas con carencias significativas y con necesidades vitales. Al respecto existen algunas concepciones teóricas de gran valor científico como las de la teoría de la modificabilidad estructural cognitiva y la educación experiencial. Una tercera herramienta consiste en la adquisición de los conocimientos hasta ahora logrados por la neurociencia, en torno de los procesos formativos para el desarrollo de habilidades y competencias y la compresión neurobiológica del aprendizaje. Una cuarta herramienta tiene que ver con los avances respecto de las teorías del procesamiento de información. Otras herramientas son las referidas a la epistemología de las diferentes ciencias y la estructura de las disciplinas no científicas, no ya desde la concepción escolarizante de tipo fragmentado, sino las referidas a la ciencia modo dos.

Este marco de referenciación formativa se hace necesario y por tal razón este documento se aproximara a cada una de las herramientas mencionadas con el fin de abrir la posibilidad de indagación y construcción de un todo formativo para la generación de los nuevos maestros formadores.

Formación como categoría.

Cuando la mente se interna en los mares y océanos de pensamientos y haceres humanos en relación con la educación, las raíces se adentran mucho hasta el inicio de los tiempos y se extiende a lo largo de los siglos en redes densas y extensas que abarcan tiempos y lugares. Si se pudieran teñir estas redes, los colores se aunarían de acuerdo con los tiempos y sitios, y si la visión fuera tridimensional, los colores adquirirían tonalidades bien particulares. Es posible que si la atención de centra en encontrar un hilo conductor o algo que una a todo esto, posiblemente encontramos alguna red mas evidente y que toca muchas de formas diferentes.

En los extremos de esta gran red que es inmensa, sus extensiones son muy delgadas y hasta en algunas ya no se notan y han pedido sus colores. Total, ya casi nadie sabe de que se trata cuando se habla de educación. Muchas veces uno tiene que remitirse a los documentos de los Ministerios de Educación pero estos son tan normativos que la esencia misma de lo que podría ser educación se ha perdido. Fines e intencionalidades varían de listados a listados , tiempo a tiempo, que no hay manera de ver un algo que los aúna y les de sentido. Los últimos documentos y legislaciones de nuestro ministerio de educación, nada tienen que ver con lo que uno esperaría que se haya aprendido de todos los desaciertos anteriores. Se ubican en mas normatividad que cada vez cierra las puertas al cambio paradigmático que se necesita.

Si se hace un análisis como el que hizo AlineHelg respecto de la educación en Colombia desde 1918 hasta 1957 unido a otro excelente documento como el que se realizó en la Universidad de Harvard compilado por Fernando Reimers, titulado Distintas escuelas diferentes oportunidades como los retos para la igualdad de oportunidades para América Latina, en el año de 2002, por solo citar estos dos textos clásicos y muy serios, se evidencia que de verdad la educación perdió su rumbo y su sentido. Lo que se hace es “arreglar la sillas”, mientras la nave se hunde.

Es posible entonces dejar que esa red,convertida ya en una gran maraña, imposible de leer y descifrar, se elimine por si misma y no seguir haciéndole el juego y fortaleciendo lo que no debe fortalecerse ya, como son las instituciones educativas con toda su parafernalia escolarizante generadoras de desigualdad, de inequidad y de heteronomía. Nuestra sociedad Colombiana se halla 40 años atrasada en ciencia y desarrollo respecto del concierto del mundo y con ese sistema educativo actual, es imposible avanzar, por mas salas de computadores que se compren y se envíen a las escuelas.

Si alguien preguntara, usted esta seguro de que en esos sitios denominados escuelas y colegios, instituciones y aun en las universidades, de verdad se hace formación de personas con todo lo que se requiere para moverse feliz y productivamente en el milenio? Yo no creo que se responda que si y si lo hace es que esta ciegoo no tiene criterios de juicio.

Son muchas las evidencias de la ineficiencia e ineficacia del sistema educativo en este país y en los otros también, es una verdad a voces pero que se maneja con gran optimismo gubernamental, citando cifras y cifras pero en la realidad eso no se ajusta a lo que son las personas formadas por ese sistema y menos por los que nunca logran hacerlo, pues es tan rígido, que muchos prefieren abandonarlo, o no entrar en semejante estructura tan aburrida.

Desde lo mas recóndito de la edad media y un poco antes, apareció un concepto muy importante que posiblemente nos pueda salvar ahora, si lo descubrimos en su sentido y en su pertinencia a las dinámicas del milenio.

Se trata del concepto formación. No quiero asemejarlo a educación puesto que no se con seguridad que es eso, y dudo que alguien lo sepa. Voy a ubicarme en dos extremos, el que nos proporciona hoy la neurología a través de neurociencias y desde el supuesto origen del concepto mismo, al menos en occidente.

Sin ir mas lejos, Gadamer, en Verdad y Método, trata muy bien esto y por tal razón valdría la pena que te remitieras a ese texto para leerlo completo. Yo simplemente quiero recoger un par de ideas al respecto que me sirvan para fundamentar lo que desde neurociencias pueda afirmar.

Los conceptos migran de acuerdo con la velocidad de los vientos producidos por los movimientos de pensamiento y de productividad en las comunidades humanas. Van cambiando de sentido o mejor de significado a medida que otros factores los rodean y así como formación, fue migrando poco a poco hasta llegar a este tiempo.

Si al inicio consistía generar en mi la imagen de Dios, con el correr de los tiempos llego a ser simplemente cosa de buen gusto. Sabemos que fue Hegel quien mejor trato este concepto y muchos otros le dieron significados convenientes. Quienes se formaron bajo ciertos significados como la ascética cristiana, pensaron e hicieron ciertas cosas que la historia ha develado de muchas formas, algunas horribles como la inquisición y hoy como la pederastía y otras cosas parecidas. Pero también cosas muy hermosas como el arte, la escritura, las catedrales, y algunas prácticas de caridad. Se defendieron mucho los valores, las creencias, la fe, pero efectivamente en la vida de las personas no ocurría así. Sin embargo, ciertos hábitos fueron muy sanos y edificantes, pero si se los compara con los generados por otras culturas como las orientales, estos hábitos y comportamientos fueron mas exigentes y llenos se gran significación. Son muchas las manifestaciones de ciertos tipos de formación, unas muy estrictas y otras muy laxas.

La realidad es que el mundo de hoy que no es el de hoy, sino el del futuro, exige mucho de las personas, pero que sentido tiene eso, si la gente no es feliz? Conjugar lo productivo con la felicidad es uno de los retos mas importantes de este milenio. Muchas cosas han cambiado y la velocidad con que otras aparecen, hace que sea necesario pensar en otro tipo de adaptación, no pasiva, sino proactiva. Adaptación proactiva, esencia de la inteligencia moderna o como ahora de dice, mente abierta.

La propuesta de identificar y mejorar el sentido de la categoría formación para poder reemplazar el término educación, puede ser significativa, si lo que se entienda como tal, sea lo suficientemente comprensiva que abarque lo necesario para ser feliz y además muy productiva, social y personalmente.

Al insistirse en la necesidad de aprender a diseñar planes de formación, se esta acudiendo a la totalidad de la persona y ello trae implicaciones muy serias que tienen que ver con la compresión de las dinámicas de futuro o lo que es lo mismo, la contextualización en donde ocurren las cosas y la forma como ocurren y además estar plenamente satisfecho haciendo lo que hace y viviendo lo que vive en compañía de otros.

En el terreno de la normatividad obsoleta, que se traduce en infinidad de actos administrativos que paralizan la posibilidad de transformar la educación en procesos de formación, surgen muchos problemas estructurales que están muy bien explicados en la Agenda del Siglo XXI de la Unesco en la pag 193 y siguientes, en donde desde las percepciones que tienen los responsables de la política educativa ( ministros de turno), hasta los obsoletos y caducos planes de estudio de la facultades de educación, pasando por los roles inadecuados de los profesores, hacen que el resultado sea de que los niños no están aprendiendo ni desarrollándose . Las escuelas y la educación hoy es así, porque quienes han estado al frente, han querido que sea así. Le cerraron toda la posibilidad de crecer y avanzar.La situación de magnifica en la realidad de los jóvenes, no de los que tienen siempre la posibilidad, sino de los que no la tienen que no muchos mas y para ellos las oportunidades se van dando desde otras instancias que por lo demás también necesitan ajustes en sus visiones. Se trata de la educación intermedia que en el fondo es remedial y que desafortunadamente mientras no gane todo el prestigio, será pagada por debajo de los estándares.[2]

Es hora de hacer y pensar desde otros referentes de sentido. Parece que pensar desde las dinámicas de futuro, desde la esencia misma de la felicidad humana y desde la convivencia, podría darnos un buen empujón para dimensionar lo que significa formación en este milenio.

Formación en términos de futuro significa reconocer las condiciones en que las personas se encuentran y lo que los entornos ha hecho de ellos. Pero también del potencial que tienen. Por ello debemos abordar la resiliencia en los nuevos procesos formativos. Formación significa identificar las variables que están inscritas en las dinámicas del futuro y que deben convertirse en procesos de desarrollo de habilidades y de competencias de las personas, de todas las personas. Formación significa maestros formadores. Formación significa nuevos espacios de formación. Formación quiere decir, logro de la autonomía. Formación abarca la totalidad del ser humano y eso quiere decir tiempo, tiempo cualificado de acción y de construcción de futuros. Formación significa complejidad y abstracción. Formación significa desarrollo cognitivo para la competencia cognoscitiva y divergente. Formación es definitivamente una categoría que hay que configurar y definir en términos procesuales. Es innovación y es productividad en todo sentido.

Formación resiliente.

Dadas las características de la gran mayoría de las personas que deben formarse, ya sea porque están en edad de hacerlo, o porque su educación fue de mala calidad o, simplemente porque son responsables de formar a otros, la resiliencia represente una de las posibilidades teóricas y operacionales mas significativas en las nuevas necesidades de formación.

La idea de que la educación debe ser el motor del desarrollo representa una de las mas fascinantes elucubraciones que se han hecho y da la casualidad que en este país el tipo de educación que se tiene y se ha impuesto a las diversas generaciones nos ha dejado atrasados 40 años y ha causado mas males que el narcotráfico.

Ahora que estamos en pleno inicio del milenio, se aprecian los efectos de ese tipo de políticas que hicieron de la educación lo que apreciamos todos los días. Sus efectos no pueden ser ocultados y entonces uno de ellos es la clase de personas que requieren procesos formativos de calidad que los ponga a tono con las competencias necesarias y suficientes para hacer de su vida lo que no pudo ser con otras personas, las educadas. Son muchos los niños y los jóvenes que requieren una nueva mirada por parte de quienes supuestamente deben ejercer roles de formadores. Pero lamentablemente solo encuentran profesores que dan clase, en los sitios menos propicios para ser formados.

Cuando relacionamos los procesos de formación con la resiliencia, es porque es preciso realizar diseños que permitan la superación de las dificultades de tipo cognitivo y afectivo, que son los factores que impiden los procesos de aprendizaje y convivencia.

Aprender es aumentar el potencial cognitivo[3], cognoscitivo[4] y bioético, a través de la exposición directa a situaciones con la finalidad de elaborar experiencias sinérgica y positivas que puedan extrapolarse a nuevas situaciones y en diferentes contextos.

Esto significa que el aprendizaje, a diferencia de lo concebido anteriormente, se da en tiempo real y en la vida real y llevándolo al terreno de las organizaciones, el aprendizaje esta ligado de manera inseparable del trabajo cotidiano. Esto es lo que marca la diferencia.

Sin importar el estrato social, ni la condición real de los niños o los jóvenes e inclusive los adultos, es preciso que el proceso de formación logre, definitivamente modificar las estructuras cognitivas y afectivas de quienes deben formarse para seguir desarrollándose a lo largo de la vida.

Dado que el fenómeno que mas abunda es el de la deficiencia en el aprendizaje en todos los estratos, es necesario que, además de superar obstáculos de orden cognitivo, también se superen los afectivos y de convivencia.

Cómo es eso posible? Las suposiciones y las elucubraciones respecto de este tipo de problemas son las que han estado rondando las aulas de la gran mayoría de las escuelas y colegios y centros de formación y con la sola opinión o la buena voluntad, no puede hacerse mucho al respecto. Es preciso saber como es que funciona ese tipo de circunstancias, cuales son las estructuras que se afectan y cuales son los mecanismos que no funcionan.

La resiliencia nos ofrece una serie de posibilidades y conocimientos muy valiosos para tenerlos como principios en la elaboración de los diseños de los planes de formación. No caben en el contexto de los planes de estudio tal y como se están llevando a cabo.

Existen varias teorías y enfoques que son eminentemente resilientes y dos de ellas corresponden a la Teoría de la Modificabilidad estructural cognitiva, y la educación experiencial. La aproximación a estas se hace a través de procesos de formación de los nuevos maestros formadores, pero se pueden consultar en la Revista Internacional Magisterio, Números 12 y 40 y la 17.

Lo anterior significa que el componente formativo de los nuevos maestros formadores debe corresponder a la resiliencia ya sea por el manejo de los presupuestos que esta tiene, o a través de la formación profesional en alguna de las teorías que se anuncian mas arriba.

Lo que podemos concluir es que en adelante no puede haber procesos de formación, si no son abordados desde los presupuestos de la resiliencia en alguna de sus versiones.

Neurociencia y aprendizaje.

Llegamos al meollo del asunto. Se trata de ubicarnos en el umbral de la investigación en neurociencias. Si bien ya aprendimos que no se puede seguir realizando educación sobre suposiciones, conjeturas y elucubraciones como hasta el momento ha sido, también hemos aprendido que los planes de estudio y la forma como estos se desarrollan, no forman, ni transforman.

Mirando la historia de aquellos fenómenos que han resultado significativos en las naciones y en algunos nichos especiales de desarrollo altamente sorprendentes, la escuela no aparece como protagonista de tales resultados.

Es significativo el descubrimiento que nos trae Dan Coyle en su libro: Las Claves del Talento de Planeta en 2009 y que cambia la perspectiva de lo que significa aprender y desarrollarse.

Hasta hace algunos años todos teníamos una idea muy vaga de lo que significaba aprender y sobre eso desarrollamos el sistema educativo fundamentado en la enseñanza. Significaba que alguien dijera oralmente o lo escribiera en un tablero lo que debía quedar en la memoria de los estudiantes, y estos debían aprenderlo para repetirlo a la hora del examen, es decir recordarlo. Mas o menos ese esquema funciono por muchísimos años y después hubo variaciones, pero siempre sobre conjeturas que uno y otro educador hizo a lo largo del tiempo.

No fue sino hasta hace muy poco tiempo que la tecnología y la investigación neurológica nos pone en una nueva perspectiva de lo significa formar y desarrollar estructuras cognitivas. Si antes era una caja negra indescifrable ya hoy podemos saber, son cierta claridad, lo que pasa cuando se aprende y por lo tanto ya sabemos como producir aprendizaje.

Nunca estuvimos seguros de que era lo que sucedía cuando alguien resultaba de un momento a otro con una cierta habilidad para hacer bien cuando lo hacia mal. Siempre reconocimos a las personas que por la forma de hacer y ejecutar los distanciaba de los demás. Y por lo general nos sorprendimos cuando gente muy joven hacia cosas que maravillaban a todos. No sabíamos que era lo que ocurría en ellos, solo veíamos lo que hacían, no lo que ocurría cuando lo hacían.

Desde el inicio de los tiempos humanos, la evolución doto a los seres humanos, a todos los seres humanos de mecanismos tan poderosos que con el tiempo se han ido descubriendo. Existe todo un sistema complejo de redes neuronales que invaden el cerebro de conexiones y mas conexiones. Hasta ahí, todo eso estaba sabido hasta el año 2000. Las dentritas que por impulsos eléctricos se conectan y crean redes neuronales que hacen que todo lo demás funcione. Cuando una persona por ejemplo, aprende a caminar, esta habilidad se instala para nunca dejar de hacerlo y sus movimientos son perfectamente normales. Pero cuando aprende a montar en bicicleta pasa lo mismo. Y si mas tarde aprende a manejar un automóvil, puede hacerlo con cualquier modelo o tamaño y no deja de hacerlo con naturalidad. Por que ocurre esto?? Como es que esto puede ser? Que es lo que pasa en alguna parte para que se haga con perfecta naturalidad?? Pero si de quien estamos hablando, también nadar en las piscinas y en el mar, y además es un físico puro, y sus relaciones abstractas son para el naturales y las puede simbolizar y escribir y fuera de eso compartirlas con muchas personas, uno puede hacerse las mismas preguntas, como lo logró, que paso en su cerebro para que eso ocurriera?

Pues bien, la observación minuciosa de este fenómeno permitió que muchos científicos, entre ellos, el Dr Douglas Fields, George Bartzokis, Bill Greenough, FrederikUllen y otros muchos citados por Coyle en su libro, fueran aclarando poco a poco el misterio. La posibilidad tecnológica de la “imagen por difusión de la tensión” permitió que se midiera aquello que ocurría cuando se adquiere una habilidad, cualquiera que ella sea.

Si bien es cierto que la sinapsis por todos sabida, es un agente vital de desarrollo de la estructura cognitiva, este proceso esta siendo superado por un nuevo descubrimiento y es el del “aislamiento neuronal” que se comprueba por tres fenómenos a saber: todo lo que sucede en el cerebro responde a diminutas señales eléctricas que se transmiten a través de cadenas neuronales que integran los circuitos de fibras nerviosas. Existe una serie de eventos que hace que se produzca una sustancia muy preciada que recubre esas fibras nerviosas haciendo que se aumente la fuerza, la velocidad y la precisión de la señal. A medida que se activa un circuito específico mayor es la cantidad de esa misteriosa sustancia que lo optimiza en términos de velocidad y precisión y así, tanto los pensamientos, como los movimientos, o las habilidades, son mas rápidos y precisos, es decir, mas eficientes.

La habilidad es entonces eficiencia (velocidad y precisión), de los circuitos neuronales ocasionada por el aislamiento que le ofrece la “mielina”, sustancia milagrosa que rodea las fibras nerviosas en la proporción en que haya estímulos y “señales”. Haber llegado a las raíces biológicas del aprendizaje significa haber dado un giro verdaderamente coperniciano respecto de loque significa aprendizaje y formación. Estas ideas, traídas por Coyle en su libro, son de verdad muy importantes ya que nos centran en EL DESARROLLO DE HABILIDADES que en adelante deben integrar los procesos de formación.

Al saber y comprender un mecanismo claro como este, las conjeturas anteriores supuestas por tantos y tantos educadores del pasado, quedan congeladas y van al lugar de las historias contadas desde la imaginación. Se abre pues una nueva ventana la cual es necesario explorar con la rigurosidad necesaria para convertir todo ese conocimiento en procesos formativos.

Desde la teoría de la modificabilidad estructural cognitiva, todo esto tiene sentido o mejor, los presupuestos de Feuerstein adquieren sentido desde los descubrimientos de la neurociencias. Las fases del acto mental adquieren nueva realidad y claridad vistos desde el aislamiento neuronal generado por la producción de mielina.

Procesamiento de información.

Procesos que tiene que ver con las nuevas formas de llegar y de procesar información de hacen necesarias, pues la lentitud de los antiguos procesos de lectura lineal deben ser superadas por lectura proposicional y experta. El uso de nuevos instrumentos como los mapas mentales y conceptuales, redes y bitácoras de formación, video y en fin lo que la tecnología esta proporcionando debe ayudar sustancialmente a los desarrollos cognitivos a favor de los avances cognoscitivos.

Se trata de abordar de otra manera muy diferente que la anterior, los conocimientos producidos en la historia, para lograr el saber. Se trata de dominar los procedimientos y las técnicas y de desarrollar el pensamiento estratégico y sistémico.

Pensamiento Divergente.

Como se trata de indagar por lo que se ha denominado “innovación”, es muy importante ser lo suficientemente analíticos para poder abrir algunos espacios que nos conduzcan a las comprensiones necesarias para mejorar los diseños de procesos de formación, no solo para la productividad y lo que esta subsumido en tal concepto, como el de capacitación, sino, y necesariamente para desarrollar el valor mas significativo, que es el de la pertenencia en el proyecto nacional, que es lo que corresponde a la educación con nuevo sentido.

La contribución de este tipo de procesos para el desarrollo de la nación, es realmente bien compleja y tiene muchas variables, que de no entrar en plena armonia y equilibrio, se corre el riesgo de perder la oportunidad para la significación social y comunitaria y entonces el esfuerzo es lanzado en direcciones no pertinentes, no adecuadas y poco significativas.

Lograr niveles de pensamiento divergente, como base de la innovación es un proceso muy exigente y que requiere de todo un componente de desarrollo de habilidades muy precisas y sinérgicas. El verdadero fundamento se encuentra en el mecanismo de la mielinización, es decir, el desarrollo de las habilidades, como ya se mencionó mas arriba. Tanto para conocer como para crear. Hoy conocemos mucho mas de este tipo de procesos que en el siglo pasado y esto nos pone en ventaja comparativa respecto de la calidad de los procesos formativos que podamos diseñar en adelante.Cfr Dan Coyle.

El pensamiento divergente esta ligado a la calidad de los repertorios de estrategias utilizadas para el abordaje de situaciones y esencialmente con la elaboración de categorías conceptuales y principios sinérgicos. Se trata de un proceso intencionalmente diseñado y ejecutado cuidadosamente con el uso de un protocolo cognitivo muy preciso. No hay innovación sin una estructura mental que la produzca y eso significa precisión en los procesos perceptivos, en la habilidad para la comparación, el análisis y también de los insumos respecto de la calidad y dominio de los conocimientos y saberes adquiridos y elaborados, pues en realidad una innovación resulta de un tipo de relación virtual, en un contexto específico. Esto esta ligado a la formación para la investigación, sin la cual la innovacion queda reducida a simple copia o modificación. Los niveles de investigacion deben aumentarse considerablemente en todos los niveles y la educación tecnológica debe, necesariamente, derivar su enfasisis en ese sentido.

La tendencia actual de fundamentar este tipo de procesos solo en competencias, es precisamente desconocer el poder de lo educativo y la investigación en la transformacion integral de las comunidades y la construcción de la nación en el nuevo milenio. Es como si solo algunos tuvieran esas tareas (los políticos) generando una sociedad excluyente, los que si y los que trabajan.

Como se trata de un congreso dedicado a la reflexión entre aprendizaje, innovación y formación para la productividad, la relación que quiero hacer ahora, es preciasamente en torno de :

Los factores estrategios para la productividad en el milenio.

Las dinámicas del presente y del futuro han marcado algunas exigencias que por lo demás no son permanentes y van cambiando en la medida en que los factores de globalización se van acentuando.

El hecho en que nos encontremos en medio de una sociedad que se transforma de manera muy rápida y en direcciones no claras, como es la de la información y del concimiento, hace que los enfoques del pasado queden también muy rápidamente en estado de obsolescencia para dar pie a otros un poco mas cercanos a ese tipo de transformaciones. Es claro que en lo que tiene que ver con la educación formal no es asi, esta ha permanecido en donde siempre ha estado, pero sin embargo tiene un gran valor en las comunidades y las sociedades.

Las diversas relaciones de las que ya se ha hablado y que tratan de minimizar los defectos estrucurales causantes de la inequidad, como la del supuesto equilibrio entre productividad y calidad de vida, y otras derivadas en términos de competitividad, y mercado etc…, hacen que podamos deslindar sus definiciones con el fin de establecer los límites y los alcances de las políticas que se derivan en programas.

En este contexto surgen pues algunos factores que bien vale la pena compartir con el fin de ubicar el lugar de ciertos proceso formativos relacionados con pensamiento y el aprendizaje.

El primero de ellos tiene que ver con procesos permanentes de transformación.

Se insiste en que las tasas de aprendizaje de las personas y las organizaciones deben estar muy por encima de las tasas de cambio.

Lo cual lleva a la necesidad de comprender, desde todas las perspectivas, aquello de aprender a aprender, que no es un simple enunciado, sino una red de componentes cognitivos y cognoscitivos necesarios y suficientes.

Consecuente con esto, urge la necesidad de generar gran flexibilidad mental que se traduzca en mejores enfoques de gestión de procesos formativos para que definitivamente se logren renovadas concepciones y reflexiones productivas y diálogo de crecimiento humano.

El segundo factor hace referencia a la necesidad de constituir cadenas de valor agregado y este esta integrado por:

Las alianzas y las construcciones explicitas y concertadas entre las organizaciones pares.

Identificar e inplementar secuencias lineales y no lineales entre los procesos de producción y mercadeo.

Crear e incluir organizaciones laterales para la prestación de servicios y suministros de insumos de todo tipo. Cfr Ricardo Semler.

El tercer factor tiene que ver con la necesidad de realizar referenciación competetitiva.

Esto signfica indagar por prácticas y procesos de manera sistémica y sistemática a nivel nacional e internacional para aprender de calidad y productividad en niveles diferentes.

El cuarto factor,que es el que nos interesa en este momento, hace énfasis en procesos de generacion de nuevas habilidades mentales es decir, pensamiento.

Estos procesos como ya se dijo antes, tienden a altos niveles de inteligencia por medio del desarrollo de nuevas habilidades cognitivas, intelectuales y afectivas en espacios dinámicos de formación y aprendizaje. También es preciso cambios en las formas de interacción para el aprendizaje entre pares y asi poder descurbir y crear nuevas estrategias de productividad y conocimiento pertinentes a las dinámicas del nuevo milenio.

El quinto factor estrátegico que posiblemente tenga que ser el primero, consiste en la necesidad de construir una visión compartida de futuro.

Ello conlleva a la necesidad de aplicar un pensamiento sistémico para percibir el mundo como un sistema, identificando factores, elememtos y sus diferentes relaciones y criterios. Realizar permanente actualización sobre tendencias que conlleven a la identificación de la misión de la organización por medio de una reflexión productiva sobre las informaciones originadas a nivel mundial.

Como se aprecia este tipo de factores conllevan una carga muy grande de complejidad y abstracción y esto es precisamente lo que se debe identificar como ejes sobre los cuales deben diseñarse los planes y programas de formación en este milenio.

Conclusiones.

La investigación en neurociencias nos pone en situación muy diferente en relación con lo que concebíamos como aprendizaje y esto nos obliga, no solo a saber mas acerca de ello, sino que nos permite elaborar mejores diseños de procesos de formación.

De otra parte, la velocidad en las transformaciones y las dinámicas sociales y productivas, también nos obligan a hacer revisiones, muchas de ellas de tipo estructural, para poder jugar el juego de la globalización.

Se debe mejorar significativamente la concepción de desarrollo humano de las personas.

Es necesario que se generen dinámicas para que los cinco factores sean realidad cotidiana.

Se deben desarrollar procesos de formación para que la productividad del conocimiento y la calidad sean posibles, ya que de ello depende el nivel de competitividad, de sostenibilidad y equilibrio.

No pueden disfrazarse las causas de la inequidad con definiciones y enfoques coyunturales de educación mercantilista eso es muy peligroso y ese tipo de visiones, sobre las cuales se montan ciertas políticas, hace que la educación se convierta en mera capacitación y eso va en contra del desarrollo humano.

Muchas gracias por su atención.



[1] proyectocisne@cisne.org

[2] En este sentido, surge una reflexión en torno de tal vinculación de la educación a la productividad a través de la formación técnica, la tecnológica y especializaciones específicas, cuyos egresados deberán , de acuerdo con el plan sectorial del Ministerio de Educación, llenar los cargos de mandos medios y los puestos de trabajo calificado y de técnicos especializados vacios u ocupados por personas no calificadas. En el 2010 se espera que el 35% de la matrícula de la educación superior sea capacitada desde lo técnico y lo tecnológico y el indicador es: mano de obra calificada y disponible para salarios mínimos y bajos.

[3] Se refiere a lo estructural.

[4] Tiene que ver con lo funcional.

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